El Suspiro de Moya es un postre tradicional de Canarias, España. Este postre dulce y cremoso se originó en el pueblo de Moya y ha sido una delicia muy apreciada en la región durante generaciones. Se elabora con unos pocos ingredientes sencillos, pero sus sabores son ricos y deliciosos. En este artículo, exploraremos la historia del suspiro de Moya y luego compartiremos una receta tradicional para que la pruebes en casa.
¿Qué es el suspiro de Moya? Historia de Suspiro de Moya
Los orígenes de suspiro de Moya son un poco misteriosos, pero se cree que el postre es creación de las monjas del cercano Monasterio de Santa María de la Dehesa. Las monjas de Moya llevan cientos de años creando delicias para la gente del lugar, y el suspiro de Moya es sólo una de sus muchas recetas maravillosas.
El suspiro de Moya siempre ha sido un postre popular en Canarias, y lo disfrutan personas de todas las edades. Este dulce se sirve a menudo en festivales y eventos especiales, y es la forma perfecta de celebrar ocasiones especiales como cumpleaños, aniversarios y bodas.
Cómo hacer Suspiro de Moya
Hacer la versión tradicional de Suspiro de Moya es fácil. Para empezar, necesitarás los siguientes ingredientes:
• 4 tazas de leche entera
• 4 huevos grandes, a temperatura ambiente
• 1 taza de azúcar granulada
• 1 cucharada de ralladura de limón
• una pizca de sal
• nata montada y canela para decorar
Instrucciones:
1. Vierte la leche en una cacerola grande y caliéntala a fuego medio hasta que empiece a hervir.
2. En un bol grande, bate los huevos, el azúcar, la ralladura de limón y la sal hasta que estén suaves.
3. Una vez que la leche haya empezado a hervir, retírala del fuego y viértela lentamente sobre la mezcla de huevo, batiendo constantemente para evitar que los huevos se cuajen.
4. Cuando hayas añadido toda la leche, vuelve a poner la mezcla en la cacerola y cocínala a fuego lento, removiendo constantemente, hasta que espese y cubra el dorso de una cuchara, unos 20 minutos.
5. Retira la cacerola del fuego y reparte la crema en tazas individuales. Deja que se enfríen a temperatura ambiente y luego cúbrelas con film transparente y mételas en el frigorífico durante al menos 3 horas, o hasta 24.
6. Cuando estés listo para servir el suspiro de Moya, cubre cada taza con un poco de nata montada y una pizca de canela.
¡Disfruta!
Ahora que ya sabes cómo hacer suspiro de Moya, ¡es hora de que lo pruebes! Este delicioso postre cremoso es la forma perfecta de terminar una comida, y sin duda se convertirá en una de las delicias favoritas de tu familia. ¡Que aproveche!