Las filloas son un postre gallego tradicional que se asemeja a los crepes o las tortitas. A veces conocidas como flanes o buñuelos, las filloas se elaboran con una delicada masa que contiene huevos, leche, harina y azúcar. Suelen tomarse como postre, pero también pueden enrollarse y degustarse como tentempié. A continuación, te proponemos una receta sencilla y deliciosa para que prepares filloas caseras.
Ingredientes
Para preparar filloas, necesitarás los siguientes ingredientes:
- 2 tazas de harina
- 2 tazas de leche
- 4 huevos
- 3 cucharadas de azúcar
- Una pizca de sal
- Mantequilla
o aceite para la sartén
Preparación
- Mezclar los ingredientes: En un bol grande, mezcla la harina, la leche, los huevos, el azúcar y la sal. Remueve bien la mezcla hasta obtener una masa suave y espesa, sin grumos.
Deja reposar la masa:</b Tapa el bol con un paño de cocina y deja reposar la masa 30 minutos.
- Calienta la sartén: Coloca una sartén antiadherente a fuego medio. Añade un poco de mantequilla o aceite a la sartén y extiéndelo uniformemente con un papel de cocina.
Haz las filloas: Vierte un cucharón de masa en la sartén y extiéndelo para formar una capa fina y uniforme.
- Vuelca la filloa: Usa una espátula para dar la vuelta con cuidado a la filloa y cocínala otros 1-2 minutos por el otro lado.
- Sirve las filloas: Transfiere las filloas cocinadas a un plato y espolvorea con azúcar si lo deseas. Sirve las filloas calientes o a temperatura ambiente.
Variantes y consejos
Deja reposar la masa:</b Tapa el bol con un paño de cocina y deja reposar la masa 30 minutos.
Haz las filloas: Vierte un cucharón de masa en la sartén y extiéndelo para formar una capa fina y uniforme.
Hay innumerables formas de personalizar las filloas a tu gusto. Prueba a añadir extracto de vainilla, ralladura de limón o canela a la masa para darle más sabor.
Las filloas también se pueden servir con una variedad de coberturas, como feijoa, dulce de leche, fresas o nata montada. Para darle un toque salado, utiliza la masa para hacer unas tortitas más contundentes y sírvelas con queso, jamón o verduras salteadas.
Al preparar la masa, asegúrate de usar mucha leche para que quede fina y ligera. Si la masa queda demasiado espesa, añade más leche hasta conseguir la consistencia deseada.
Para ahorrar tiempo, puedes preparar la masa con antelación y guardarla en el frigorífico hasta que la necesites. La masa se conserva hasta 24 horas, lo que te permite preparar filloas cuando quieras.
El toque final
Las filloas son un postre sencillo y delicioso que, sin duda, se convertirá en el favorito de la familia. Esta receta es fácil de seguir y se puede personalizar con una variedad de sabores y coberturas. Tanto si las sirves como postre o como tentempié, estas tradicionales filloas gallegas serán un éxito entre tu familia y amigos.