Los callos son un plato tradicional español que no a todo el mundo le gusta, pero una vez que descubras su delicioso sabor, ¡te engancharás! Suele hacerse con callos y chorizo, pimentón y caldo de carne, y el secreto de su increíble sabor radica en los ingredientes de excelente calidad y en la forma de prepararlos. En este artículo, compartiremos contigo una receta tradicional de callos paso a paso que seguro que impresionará a todos a quienes se lo sirvas.
Ingredientes para callos
Esta receta de callos es suficiente para unas cuatro o seis raciones, así que tenlo en cuenta a la hora de comprar los ingredientes. Necesitarás lo siguiente:
- Un kilo de callos cocidos y pelados.
- Un par de chorizos españoles o normales, loncheados.
- Dos patatas medianas, peladas y troceadas.
- Cuatro dientes de ajo, picados.
- Dos cebollas medianas, picadas finas.
- Dos hojas de laurel.
- Una cucharadita de pimentón ahumado.
- Una pizca de azafrán.
- Medio vaso de caldo de carne de buena calidad, como de ternera o buey.
- Un poco de aceite de oliva virgen extra.
- Sal y pimienta al gusto.
Prepara los callos
Paso 1: Una vez que tengas todos los ingredientes, es hora de empezar a preparar los callos. En una olla grande, calienta cuatro cucharadas de aceite de oliva virgen extra y añade las cebollas y el ajo picados. Cocina a fuego medio hasta que las cebollas estén translúcidas.
Paso 2: A continuación, añade el chorizo loncheado y las hojas de laurel, y cocina unos minutos hasta que el chorizo empiece a dorarse. Esto ayudará a impregnar el plato de su delicioso sabor ahumado.
Paso 3: Añade el pimentón, el azafrán y las patatas. Remueve bien para mezclar y cocina un par de minutos más.
Paso 4: Añade los callos y el caldo de carne, y remueve para mezclar. Sazona con sal y pimienta al gusto.
Paso 5: Lleva la mezcla a ebullición, luego reduce el fuego y cocina a fuego lento durante unos 30 o 40 minutos, o hasta que las patatas estén tiernas. Si quieres, en este punto puedes añadir perejil fresco para darle más sabor.
Sirve los Callos
Una vez que los callos estén listos, es hora de servirlos. Puedes disfrutarlos solos o acompañarlos de varias guarniciones, como ensalada, pan o huevos cocidos. También son deliciosos servidos sobre una cama de arroz o pasta.
Esta receta tradicional de callos seguro que impresionará a todos a quienes se lo sirvas. Su combinación única de sabores y aromas lo convierten en un plato clásico español perfecto para cualquier ocasión. ¡Disfrútalo!